Aborto tubárico: Qué es, síntomas y riesgos
Qué es el aborto tubárico y por qué se produce, cómo se produce y cuáles son las consecuencias para la mujer y su fertilidad.
Abortos naturales: causas, síntomas, tipos y tratamiento
Aborto espontáneo y principales datos de interés
Las claves para hacer frente a un aborto espontáneo
Abortos naturales: causas, síntomas, tipos y tratamiento
Entre los diversos tipos de aborto espontáneo que puede experimentar una mujer hay uno bastante particular, el aborto tubárico. Conozcamos mejor este tipo de aborto para saber mejor de qué se trata, si existen causas, síntomas y cuáles son los riesgos o consecuencias de sufrir uno.
¿Qué es el aborto tubárico y cómo sucede?
El aborto tubárico es un tipo particular de aborto que ocurre después de un embarazo tubárico, el tipo más común de embarazo ectópico.
Un embarazo ectópico ocurre cuando el embrión se implanta fuera del útero y específicamente en una de las trompas de Falopio . En este caso el embarazo no puede continuar y la consecuencia natural es un aborto tubárico, caracterizado por la expulsión del embrión que no puede seguir desarrollándose en las trompas.
Las causas del aborto tubárico
Si el diagnóstico de embarazo ectópico no se realiza a tiempo, el embrión se desarrolla y crece dentro de la trompa hasta que se rompe. En estos casos la mujer se ve afectada por fuertes dolores abdominales, sangrado y otros síntomas de malestar general. Pero vamos a explicar mejor cómo se produce el aborto:
Desde el momento en que el óvulo fecundado se implanta, necesita naturalmente un entorno adecuado para su crecimiento y nutrición. Y cuando el implante se lleva a cabo en las trompas de Falopio, invade los vasos sanguíneos y dilata las paredes. Pero las tubas uterinas (trompas de Falopio) no son tan anchas como el útero y los vasos son más pequeños.
Básicamente existen dos situaciones que provocan el aborto tubárico: en la primera, los vasos del óvulo consumen los de la trompa provocando un sangrado que a su vez provoca el desprendimiento del óvulo de la pared; en la segunda hipótesis, el óvulo se implanta entre dos capas de las trompas de falopio, creando un vacío que da lugar a una hemorragia.
En ambas situaciones, el óvulo desprendido puede permanecer en el tubo rodeado por un coágulo de sangre. En cambio, el sangrado del tubo fluye hacia la cavidad abdominal y puede causar dolor en la parte inferior del abdomen.
Reconocimiento del aborto tubárico: el diagnóstico
Para realizar un diagnóstico correcto, es necesario realizar una ecografía transvaginal que mostrará un útero vacío y sin cámara gestacional . Otro control importante a realizar durante el embarazo es el examen de los niveles de la hormona Beta-hCG , la hormona del embarazo.
De hecho, en los embarazos ectópicos, los niveles de esta hormona aumentan muy lentamente en comparación con un embarazo que comenzó en el útero.
Sin embargo, el valor de beta-hCG por sí solo no es confiable para hacer un diagnóstico de aborto, que en cambio se puede decir que es completo solo con una ecografía transvaginal .
El escenario que devuelve la ecografía es el de un útero vacío en el que no se ve ni la cámara gestacional ni ningún coágulo de sangre que aún no haya sido expulsado. En cuanto a la situación de las trompas, hay dos posibilidades: o la trompa está intacta y se ve el huevo rodeado de coágulos de sangre, o la trompa está dañada y por tanto no se ve nada en su interior.
Reabsorción y consecuencias
Si el embarazo se prolonga, la principal consecuencia del aborto tubárico es la rotura de la trompa de referencia.
En los casos en que no se produzca la rotura, se puede iniciar un tratamiento farmacológico para inducir el aborto, pero siempre es recomendable contactar con su ginecólogo para que le prescriba la terapia más adecuada.
En cambio, cuando hay una rotura de la trompa (y por tanto también un derrame de sangre), es necesario someterse a una operación para eliminar los restos de sangre y del propio embrión. En casos severos puede ser necesario retirar el tubo y esta cirugía generalmente se realiza por vía laparoscópica .
Por otro lado, cuando el aborto se produce en un tiempo bastante corto, es posible que la reabsorción se produzca de forma espontánea. Después de un aborto tubárico con reabsorción espontánea, muchas veces anatómicamente todo se resuelve, pero siempre está en riesgo la concepción del lado afectado.
Por ello es recomendable realizar pruebas específicas en las trompas antes de pensar en un posterior embarazo.